Estamos viviendo en los últimos meses una "revolución" en el mundo de la mascotas a través de la novedosa vacuna de la Leishmania. Es un gran avance en la salud de nuestros animales. Pero la inversión económica en dicho método preventivo no debe hacernos pensar que ahí se acaba todo, porque nos estaremos equivocando.
Vacunar a nuestra mascota no nos exime de utilizar otros métodos para conseguir una efectividad casi completa. Por ejemplo, deberíamos evitar que las mascotas durmieran en el exterior en verano, momento en el que el mosquito que trasmite la Lehismaniosis suele picar al animal. Y sobre todo, no deberíamos olvidar el uso de antiparasitarios tipo collares o pipetas.
Y si nuestra mascota está vacunada, ¿ porqué debemos tener esos cuidados? Por diversos motivos:
1. La efectividad de la vacuna no es del 100%. . Existen diversos estudios con resultados dispares. Los más optimistas hablan de un 92,7 % de efectividad. Otros comentan que en zonas de riesgo la efectividad es del 60-70% . Nosotros no somos veterinarios, ni lo pretendemos, pero una eficacia así nos tiene que alertar. Tener a nuestra mascota vacunada le ayudará, no hay duda, disminuyendo las posibilidades de contraer Leishmaniosis. Pero no la anulará completamente.
2. Los antiparasitarios no sólo actúan contra la Leishmania, sino que su rango de acción es mucho más elevado. No debemos olvidarlo. Usar pipetas y/o collares puedes ayudar a combatir otros parásitos que podrían afectar a nuestra mascota.
Si necesitas más información sobre tipos de antiparasitarios: http://paramascotas.net/comercio/category.php?id_category=9